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DIARIO CÓRDOBA

 

La pintura de Antonio Bujalance se organiza en torno a diversas series que van estructurando las apetencias y soluciones plásticas de su experiencia en el estudio, cuidando siempre de no cerrar una línea de trabajo, como de lograr su contextualización en el libre desenvolvimiento de lo programado de antemano. Por esta razón sus obras recientes deben tanto a las anteriores, así como apuntan a nuevos derroteros que con ellas se abren. Siguen estando presentes los dos grandes ciclos sobre los que gira su pintura: la naturaleza y la importancia que la humanidad deja en ésta. Con respecto a las obras incluidas en el primero de ellos, su temática -ya sean arboledas, líneas de horizonte, paisajes fosilizados o estratos geomorfológicos- no es más que un pretexto para abordar una lectura libre de la figura y ensayar los procedimientos que, como el tachismo o el infomalismo, así como ciertas derivaciones del constructivismo, constituyen el ensamblaje de su pintura.

En consecuencia el repertorio formal es un fiel reflejo de las adherencias que lo real fija en la memoria del artista y del proceso que aquéllas sufren en su conversión en motivo exclusivamente plástico; de hecho podríamos establecer una gradación que iría desde los reflejos estructurados en impulsos ascensionales de una naturaleza que se transmuta en estados de serenidad y donde los instintos parecen sedimentarse bajo el manto de la razón, a composiciones más abigarradas en las que se sustituye el ritmo pautado por lograr la impresión de una acumulación de registros que se maclan en un tapiz de evocaciones florales. magmáticas y en continuo movimiento. En una línea similar es de destacar la serie Nocturno, en la que se desdeña la aportación de la figura y se opta por sedimentar la escena para que aflore el instinto de la pintura. El contrapunto lo protagonizan las obras de la serie Italia. con una mayor presencia figurativa que viene de la mano de los edificios representados, pero con una predisposición a ordenar constructiva y rítmicamente la huella del hombre en la naturaleza.